sábado, 19 de diciembre de 2009
Datos en torno a la navidad…
No tenemos una base histórica confiable que nos ayude a descubrir el origen cierto de varios de los símbolos y costumbres navideñas que se han ido quedando con nosotros, sólo existen los textos bíblicos de Mateo y Lucas que narran con asombrosa sencillez y brevedad las circunstancias de la venida de Jesucristo, y la joven pareja que no tuvieron lugar en el mesón, después de viajar 110 Km. desde Nazaret a Belén a lomo de mula en avanzado estado de gravidez.
Sin lugar a dudas toda persona está confrontada con una sociedad que celebra este milagro de amor de Dios en Cristo con variadas actividades, algunas de ellas bastante curiosas, sin pretender ser aguafiestas, he aquí algunas prácticas y su posible origen.
Por un lado están los "regalistas" que hacen de la práctica de regalar su mayor interés y por otro lado los que se centran en el cumpleaños de Cristo y su significado mas profundo de encarnarse (hacerse hombre entre nosotros), estos no sólo usan el símbolo del pesebre y nacimiento biológico sino los relatos bíblicos del Nuevo Testamento que hablan del significado de su venida, aun queda una tercera vía de buscar un balance, entre el hecho biológico de su nacimiento y el significado de este.
Hay quienes otorgan el origen de regalar a una leyenda del siglo cuarto que narra la costumbre de un religioso quien solía dejar regalos y alimentos a las familias pobres de su congregación, la tradición de “regalar” en Navidad tiene, al decir de muchos, su base en el hecho de que Cristo es el regalo de Dios para el mundo; otros dicen digámoslo derechamente, ¿es la fiesta de los regalos o el cumpleaños de Cristo?, añaden que podrían tener como sociedad “la fiesta de los regalos", pero no aceptan que se haga con el pretexto del cumpleaños de Cristo, los regalistas citan a los magos y sus obsequios; los demás replican que los obsequios de los sabios (magos) son de claro simbolismo litúrgico, los sabios (magos) representaron su reconocimiento y adoración a Cristo en los objetos materiales que llevaron, no se regalaron entre ellos.
Otros dicen que los niños lo necesitan, parece que los niños se complican menos que los adultos, los niños no necesitan juguetes, leí por ahí un comentario al respecto: "a mi hijo de un año nada le hace tan feliz como desenrollar una cinta, cubrirse la cabeza con ropa interior o tocar música golpeando la mesita del café, que es de vidrio, con un adorno de cristal, para él, lo mejor de la Navidad y los cumpleaños es la oportunidad de chupar coloridos papeles de envoltura, mientras todo el mundo está distraído con los regalos. Y mis hijos mayorcitos tampoco necesitan juguetes: Prefieren reprogramar mi computadora, quitarle los lentes a mi cámara fotográfica o pintarse la cara con mi maquillaje en el baño. Somos los padres los que necesitamos juguetes. Los necesitamos para que los niños no toquen nuestras cosas”, los regalistas dicen: no nos pongamos graves.
Se dice que los comerciantes esperan obtener un tercio de sus ganancias del año en este mes (no hay nada malo en ello, el mercado lo permite). Cada año se hacen llamados a fin de moderar el consumo; los regalistas dicen compren para que “se muevan las industrias”. Los encarnacionales dicen es un hecho de la causa, que grandes cadenas comerciales reducen la figura de Cristo, transforman al Creador, Salvador y Sostenedor del universo en un objeto de consumo, perdido tras un bosque de papeles, cintas, luces y cajas.
Sólo el evangelio de Lucas menciona el pesebre, (pesebrera, posiblemente contigua a la casa de habitación, como un corral techado, propio de las familias modestas de Palestina). Mateo registra la visita de los sabios (magos), entrando en una casa, (Mateo 2:11); se podría decir que el pesebre sirvió como “maternidad” para el nacimiento de Cristo para luego trasladarse a casa de alguno de los pastores en Belén.
La costumbre de armar el pesebre se adjudica a Francisco de Asís a objeto de recrear la escena del nacimiento y los franciscanos habrían traído tal costumbre al nuevo mundo, como símbolo muy propio del verdadero espíritu cristiano.
El árbol de Navidad tiene más de un origen; una de las tradiciones sajonas dice que un monje del siglo VIII taló un roble que las tribus tenían por sagrado al culto de Odín y en su lugar eligió un Abeto, como emblema de la fe cristiana, se ha insertado muy bien en nuestra cultura, incluso con nieve en el verano chileno.
De la mesa navideña,no se anda muy bien, cola de mono (con altas calorías para zonas más bien frías), pan de "pascua" con cientos de calorias por centimetro cuadrado, los encarnacionales agregan ¿Habrá suficiente creatividad para celebrar la Navidad a la chilena, en el espíritu de Cristo?.
La exactitud de la fecha, 25 de Diciembre, nacimiento de Cristo no está del todo definida, una de las tradiciones dice que por el tiempo del monje Crisóstomo S.IV se cambió al 25 de Diciembre porque los paganos del imperio en esta fecha celebraban el nacimiento del dios-sol Mitra y los obispos trasladaron la fiesta del 6 de Enero al 25 de Diciembre de modo que el nacimiento de Cristo desplazara el nacimiento de Mitra. Otra tradición dice, que el monje Dionisio por encargo del papa San Juan I se le encomendó investigar la fecha verdadera por el año 525 de nuestra era, dicho monje se equivocó en la fijación precisa del hecho. Se sabe que Cristo nació durante el reinado de Herodes el Grande, el mismo que ordenó la matanza de todos los niños de Belén menores de dos años, éste murió en el año 750 de la fundación de Roma, paradójicamente la era cristiana debería comenzar en el año 4 AC. El nacimiento de Cristo se conmemoró el 20 de mayo en Egipto y en Palestina, hasta el siglo III, y en otros lugares el día 06 de enero o el 25 ó 28 de marzo, lo más probable es que nunca lo sepamos exactamente.
De la palabra Navidad Latín, natividad - nacimiento, celebramos la natividad de Cristo o el nacimiento y no la pascua (del hebreo Pesah- pasar por alto), en el sentido de perdonar excusar. La pascua es la celebración de la liberación nacional de los Judíos del faraón de Egipto, en el tiempo de Ramsés II 1280 AC, esto fue lo que conmemoró Jesús y sus discípulos el día antes de su crucifixión, el día 14 de Nisán. En la actualidad la pascua es celebrada por los judíos, regida por el calendario lunar y es variable en fecha, dura siete días.
Llama la atención el viejito pascuero comentan los encarnacionales, se ve individualista, nadie le ayuda, él lo puede todo, no se le conoce comunidad, origen, raza, ni nacionalidad; no sabemos nada de su familia, hijos o nietos; tiene serias limitaciones en el lenguaje, a veces expresa monosílabos rítmicos y una que otra palabra; se le ve poco adaptado al clima del verano chileno, ¡cómo sudan los pascueros especialmente los de Santiago!, ¡Qué decir de la multitud de esforzados padres a quienes el viejito los tiene de esclavos, presos de una ideología consumista que compran lo que no es útil con dinero que no tienen!. (me incluyo hasta hace un tiempo atrás), preocupa su peso para la edad, que se cuide, haga una buena dieta; el color rojo de su traje puede tener cierta relación con alguna bebida cola, podría ser un tono verdoso para su traje, un viejito ecológico, bueno será discernir qué se trae bajo la manga este viejito regordete con aspecto bonachón.
El villancico: “Noche de paz, noche de amor...” se lo debemos al sacerdote compositor, el padre Jeseph Mohor de la iglesia San Nicolás en Oberndorf cerca de Salzburgo-Austria, y la música al profesor Franz Gruber, de ello hace 180 años, un día en que el órgano no funcionó y fue necesario cantarlo en la misa del gallo con guitarra y coro que acompañó a cuatro voces en el estribillo.
La tradición de las tarjetas de Navidad se inició en Londres en 1843 por Sir Henry Cole. Este pidió a un amigo que le dibujara el diseño de una tarjeta. Su tiraje fue de 1.000 (mil) ejemplares, no obstante, se demoró 30 años en popularizarse, hoy es señal de amor y buena voluntad entre los seres humanos.
Las velas como parte de la simbología de Navidad, es de origen medieval. En aquel tiempo los cristianos creían que el niño Jesús caminaba por los pueblos y las velas encendidas en las ventanas le guiaban en la noche hacia su morada.
De la joven pareja, María y José se puede decir mucho, sacar varias lecciones contemporánea inspiradoras que se mantuvo unida ante las circunstancias adversas y muestran la diferencia cuando triunfa el amor es de calidad tal que soposrta la prueba. En el fiel, leal y honorable José que amó a su esposa aun sin comprender mucho lo que pasaba; confió en María, Ella que supo soportar en obediencia, la voluntad de Dios, pese a su estado de gravidez, súmele los comentarios del barrio, ilustra con su vida que el amor y la fe en Dios supera circunstancias difíciles para responder fielmente al llamado de Dios, el canto revolucionario (consulte los evangelios), de María deja ver una mujer con los pies en la tierra y su mirada en el cielo.
Los encarnacionales señalan que sobre todo, la Navidad es por Cristo, de Cristo y para Cristo. El nacimiento de Cristo marcó la historia del mundo, a.C. y d.C., así como marca la historia de la vida cristiana. Es la Navidad una ocasión para agradecer a Dios por estar con nosotros y mostrarnos su Gloria en Jesucristo desde Belén hasta la eternidad.
Los Cristianos auténticos no son dados a entregar una lista de cosas que se deben hacer y cosas que no se deben hacer, trazar una línea entre lo prohibido y lo permitido, no obstante, por estas fechas parece bien ordenar la agenda de forma tal que Cristo siempre quede en el centro.
José Hernán.